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La Luna Fría de diciembre iluminará el cielo con su brillo más intenso del invierno. Te contamos cuándo verla y cómo aprovecharla para hacer astroturismo.
04 December 2025
Cada diciembre, cuando el hemisferio norte entra plenamente en el invierno y las noches se hacen más largas, la última luna llena del año se convierte en uno de los fenómenos más agradecidos para quienes disfrutan del turismo de estrellasy de la observación astronómica a simple vista. En 2025, este plenilunio ocurrirá —según los datos del Instituto Geográfico Nacional (IGN)— el 4 de diciembre de 2025 a las 23:14 UTC. En hora peninsular (España), eso equivale a medianoche del 5 de diciembre (00:14 h. peninsular).
En el hemisferio sur, en cambio, esta luna llena llega en pleno final de la primavera, con temperaturas templadas y un cielo austral que ya muestra la Vía Láctea en lo alto a primeras horas de la noche. Por eso, mientras en Europa y Latinoamérica norte se vive como una luna “invernal”, en Chile, Argentina o Uruguay el ambiente será cálido y más favorable para observarla al aire libre.
La denominación procede de las tribus de Norteamérica y aparece recogida por fuentes como el Old Farmer’s Almanac, que documenta los nombres tradicionales de las lunas llenas. En diciembre, las temperaturas descendían bruscamente y las noches se alargaban, lo que dio origen al nombre Cold Moon o Luna Fría.
En Europa también se conocen otras variantes históricas como Moon Before Yule o “Luna anterior a la Navidad”, aunque la más extendida actualmente es Luna Fría, heredada del folclore anglosajón.
Como toda luna llena, su luminosidad será intensa y se elevará pronto en el horizonte este, dificultando la observación de objetos débiles del cielo profundo. Aun así, es un momento perfecto para actividades de astroturismo vinculadas a:
Senderismo nocturno y rutas interpretativas
Observación de paisajes iluminados por la luz lunar
Astrofotografía lunar, especialmente de los mares, cráteres y zonas limítrofes entre luz y sombra. Si te interesa esta materia no te pierdas
En este punto es útil recordar los consejos del Instituto Geográfico Nacional y de la NASA, que recomiendan evitar telescopios muy aumentados durante la luna llena por el exceso de brillo y apostar por filtros neutros.
Aquí tienes algunas propuestas, tanto del hemisferio norte como del sur, para aprovechar esta última luna llena del año:
Sierra de Gredos, Ávila – Paisajes nevados y cielos limpios.
Isla de La Palma – Altitud y estabilidad atmosférica perfectas para fotografía lunar.
Reserva de la Biosfera de Monfragüe – Miradores ideales para rutas nocturnas en invierno.
Valle del Elqui (Chile) – En plena primavera austral, noches templadas y excelente estabilidad.
Desierto de Tatacoa (Colombia) – Ideal para actividades divulgativas bajo la luz de la Luna.
Cabo Polonio (Uruguay) – Un clásico para vivir fenómenos lunares junto al océano.
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Mira hacia el este justo después del atardecer: la luna saldrá teñida de tonos anaranjados.
Apuesta por lugares abiertos: playas, llanuras, miradores, embalses.
Evita cielos con nubes altas: este plenilunio necesita horizontes despejados.
Lleva prismáticos: son la forma más cómoda de observar cráteres sin deslumbrarte.
Para ampliar la información técnica, el IGN publica todos los datos oficiales de fases lunares en su agenda astronómica del año.
La Luna Fría es más que la última luna llena del calendario: marca el puente entre un año que termina y otro que comienza, y es una excusa perfecta para salir de noche, respirar aire fresco y disfrutar del cielo. Tanto si estás en pleno invierno europeo como en la primavera del hemisferio sur, esta luna es una oportunidad accesible, sencilla y hermosa para acercarte al turismo de estrellas.
