Las impresionantes imágenes del interior de Orión captadas por el Telescopio Webb

Astronomía

Las impresionantes imágenes del interior de Orión captadas por el Telescopio Webb

Los astrónomos están interesados en este vivero estelar porque puede servir para comprender mejor el primer millón de años de nuestro sistema solar.

Una criatura  alada formada de gas denso y polvo, con sus fauces iluminadas por una estrella brillante, se eleva a través de filamentos cósmicos. Así han descrito algunos medios las alucinantes imágenes de la Nebulosa de Orión captadas por el Telescopio Espacial James Webb (JWST).

Un equipo de investigación internacional ha dado a conocer este lunes las primeras imágenes de la Nebulosa de Orión capturadas con el Telescopio Espacial James Webb, dejando a los astrónomos "impresionados" al asomarse como nunca al interior de esta nebulosa.

Este vivero estelar está situado en la constelación de Orión, a 1.350 años luz de la Tierra, en un entorno similar al que nació nuestro propio sistema solar hace más de 4.500 millones de años.

Pero ¿Dónde apuntó exactamente el Telescopio Espacial James Webb y qué buscó? La Nebulosa de Orión que todos conocemos existe dentro de un objeto mayor llamado Nube Molecular de Orión. La sección central se encuentra en medio de la constelación de Orión, justo debajo de las tres estrellas que forman su cinturón. El Telescopio Webb se centró en una región más pequeña e interna justo cerca de un grupo de estrellas llamado El Trapecio. Su observación fue minuciosamente planeada para capturar lo que sucede en las regiones de nacimiento de estrellas.

Los astrónomos están interesados en esta región del espacio porque les puede servir para comprender mejor lo que sucedió durante el primer millón de años de nuestra evolución planetaria.

Las imágenes de la nebulosa provienen de un proyecto de investigación llamado Photod issociation R egions for All . Es parte del programa científico Early Release Science e involucraron a más de 100 científicos en 18 países, con instituciones que incluyen el Centro Nacional Francés para la Investigación Científica (CNRS), la Universidad Occidental de Canadá y la Universidad de Michigan.

El interior de la Nebulosa de Orión visto por el Telescopio Webb. Se observa un planeta formando discos de gas y polvo alrededor de una estrella joven/ Crédito: NASA, ESA, CSA, equipo PDRs4All ERS

“Estamos asombrados por las impresionantes imágenes de la Nebulosa de Orión. Comenzamos este proyecto en 2017, por lo que hemos estado esperando más de cinco años para obtener estos datos”, afirma la astrofísica Els Peeters, quien forma parte del grupo de trabajo de la Western University. "Estas nuevas observaciones nos permiten comprender mejor cómo las estrellas masivas transforman la nube de gas y polvo en la que nacen", agrega en un comunicado.

Las nebulosas están oscurecidas por grandes cantidades de polvo que hacían imposible observarlas con telescopios de luz visible, como el Telescopio Espacial Hubble, el predecesor del telescopio Webb. Sin embargo, Webb opera principalmente en el espectro infrarrojo, penetrando el polvo. Eso ha permitido revelar numerosas estructuras espectaculares, hasta la escala de 40 unidades astronómicas, o el tamaño de nuestro sistema solar. Incluyendo densos filamentos de materia, que podrían generar nuevas generaciones de estrellas, además de formar sistemas estelares, que consisten en una protoestrella central rodeada por un disco de polvo y gas en el que se forman los planetas.

La región interior de la Nebulosa de Orión vista tanto por el Telescopio Espacial Hubble (izquierda) como por el Telescopio Espacial James Webb (derecha) / Crédito: NASA, ESA, CSA, equipo PDRs4All ERS

La siguientes imágenes pertenecen a la región interna de la Nebulosa de Orión vista tanto por el Telescopio Espacial Spitzer (izquierda) como por el Telescopio Espacial James Webb (derecha). Fueron grabadas con un filtro que es particularmente sensible a la emisión de polvo de hidrocarburo que brilla en toda la imagen. Esta comparación ilustra sorprendentemente cuán increíblemente nítidas son las imágenes de Webb en comparación con su precursor infrarrojo, el telescopio espacial Spitzer. Esto queda inmediatamente claro a partir de los intrincados filamentos, pero los agudos ojos de Webb también nos permiten distinguir mejor las estrellas de los glóbulos y los discos protoplanetarios.  

La región interna de la Nebulosa de Orión vista tanto por el Telescopio Espacial Spitzer (izquierda) como por el Telescopio Espacial James Webb (derecha). / Crédito: NASA, ESA, CSA, equipo PDRs4All ERS

"Esperamos comprender mejor el ciclo completo del nacimiento de las estrellas", señala Edwin Bergin, presidente de astronomía de la Universidad de Michigan y miembro del equipo de investigación internacional.

"En esta imagen, observamos ese ciclo en el que la primera generación de estrellas principalmente irradia el material para la próxima generación. Las increíbles estructuras que observamos detallarán cómo se produce el ciclo de retroalimentación del nacimiento estelar en nuestra galaxia y más allá".

El telescopio espacial Webb es el más potente construido hasta la fecha. Desarrollado en colaboración con la NASA, la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial Canadiense (CSA), cuenta con un espejo primario de 6,5 metros compuesto por 18 segmentos hexagonales recubiertos de oro, así como un parasol de cinco capas del tamaño de una cancha de tenis. 

¿Puedes encontrar la rana?

Por último, los científicos han mostrado una bella imagen adicional de la región norte de M42 observada con el detector A de NIRCam durante la observación de Orión. ¿Puedes encontrar la rana?